25 años desde el accidente de Chernóbil y nos siguen tratando como a estúpidos.

Tenía pensado preparar una entrada especial hoy, conmemorativa y llena de datos sobre el accidente de Chernóbil, que nos sirviese para sacar conclusiones útiles de cara a la actual crisis, pero me levanto, veo los titulares del día, y me veo en la tesitura de contestarlas debidamente, asique el resumen de Chernóbil, que tengo a medio escribir, lo reservo para mejor ocasión, que no va a perder la actualidad después de 25 años.

La pronuclear agencia de noticias Europa Press ha vuelto a la carga y se han despachado hoy con un artículo en el que ¡el "emérito catedrático" don Agustín Alonso afirma que Chernóbil fue 1.000 veces peor que Fukushima!, y se queda tan ancho el experto.

En Chernóbil quedaron evacuados para varios siglos 30 km a la redonda de la central. Cuando el sr. experto afirma que Fukushima es 1.000 veces menos, quizá se refiera a que a 30 metros de cualquiera de los reactores de Fukushima podría trasladarse el palacio imperial, la sede del gobierno japonés o la sede de la IAEA. Quizás le gustaría al sr. experto irse a instalar a 30 metros de esos reactores, rodeado de sus nietos. Y que nos envíe fotos, como hizo Fraga en Palomares.


Que quede claro, de una vez por todas, que Fukushima es muchísimo peor de lo que fue Chernóbil.

Las cantidades de partículas radioactivas depositadas en el suelo en los alrededores de Fukushima alcanzan mayores concentraciones de C-137 que las que sirvieron para prohibir el acceso en zonas alrededor de Chernóbil, cuando en Chernóbil no tenían el mar al lado ni los vientos dominantes hacia el Pacífico que se llevaron la mayoría de la radiación a zonas no emergidas. Además las zonas con concentraciones superiores a 1,43 Mbq/m2 de C-137 alrededor de Chernóbil están todas a menos de 30 km de la central, mientras que en Fukushima se han medido ya concentraciones de 3,7 MBq/m2 de C-137 a distancias entre 25 y 58 km de la central, con el viento en contra y disolviendo TEPCO todo lo que puede en agua que acaba en el Pacífico.

Cada vez que un experto pronuclear se pone a comparar compara la radiación total emitida en Chernóbil con la radiación emitida a la atmósfera por TEPCO en Fukushima, y hay una diferencia radical entre uno y otro accidente: En Chernóbil el 100 % de la contaminación radioactiva se emitió a la atmósfera, en Fukushima más del 90% de la emisión procedente de la fisión del combustible nuclear derretido y sin derretir está disolviéndose en agua, que acaba en los sótanos, cimientos, y finalmente en el mar. Y así y todo tenemos algunos viejos datos que acreditan que Fukushima había emitido cifras de C-137 de entre el 20 y el 60% de Chernóbil hasta el día 23 de marzo.

Pues si hasta el día 23 se había emitido entre el 20 y el 60 % que en Chernóbil, y llevábamos 11 días desde la primera explosión, ahora que llevamos 45 días, es seguro que tenemos C-137 emitido por un valor que estará comprendido entre el 80 y el 240% del emitido en Chernóbil... a la atmósfera... faltaría sumar el C-137 que llevan disuelto en agua en las piscinas y reactores, ese agua que está en los sótanos, en los charcos y en el subsuelo impidiendo las tareas más básicas para minimizar el accidente. Ese agua que acabará en su mayor parte en el mar.